Delgado y Elgueta, figuras fundamentalesEl Santo superó en su cancha a Juventud Unida por 4-2 luego de irse al descanso 2-1 abajo con dos tantos de Chaura, un golazo de Delgado y otro de Manosalva. La visita estuvo dos veces en ventaja por Pailacura y Elgueta.
(Por Juan Martín Cángaro). - Mientras tuvo piernas, Juventud Unida fue más que San Martín y por eso resultó merecido que se fuera al descanso en ventaja. El conjunto de Gobernador Costa vino a ganar al barrio Badén y eso se vio desde el inicio.
Porque a los 2 minutos, Lisandro Pailacura quedó solo frente a Lucas Alvarado y abrió el marcador. El gol sorprendió a San Martín que no encontraba los caminos para entrarle a un batallador elenco visitante.
La presión del dueño de casa, pese a no ser claro para hilvanar jugadas, fue acorralando a los dirigidos por Miguel Gómez. Finalmente lo que no pudo lograr por abajo el cuadro esquelense lo consiguió a través de la vía aérea. Sobre los 18, Juan Chaura cabeceó un tiro de esquina, la colocó en un lugar imposible e igualó.
Fue el golpe que necesitó Juventud Unida para darse cuenta de que era necesario salir de su campo y quitarle la pelota al rival. Comenzó a hacer circular el balón y cada vez eran más peligrosas las apariciones de sus delanteros, Pailacura y Sebastián Elgueta. El último de los dos aprovechó un contragolpe, se fue sin marca ante Alvarado, lo dejó en el camino y anotó el 2-1. Iban 38 y en lo que restó del primer tiempo el propio Elgueta tuvo dos ocasiones claras de aumentar.
El final de la primera etapa encontraba a un San Martín confundido y a un Juventud Unida envalentonado que se llevaba un enorme triunfo de Esquel.
Lo que se vio en los primeros diez minutos del complemento hizo pensar que estaba todo dado para uno de los batacazos más grandes del año. De contragolpe, los de Luis Medrano estaban para el cachetazo y no podían hacer nada contra la velocidad de Pailacura y la potencia de Elgueta. Ambos tuvieron sus ocasiones, ninguno las aprovechó y cuando el césped largo comenzó a hacer estragos en el físico de sus futbolistas, la alineación costense lo sintió.
Iban 15 minutos cuando otra vez apareció Chaura (goleador del campeonato con ocho tantos), remató al arco, el portero Julio Arrechea dio rebote, nuevamente la capturó Juanito y esta vez no perdonó.
San Martín se adueñó definitivamente del balón y tras una gran jugada colectiva, Mauro Delgado definió de manera soberbia a los 19 para dar vuelta la historia. Desde entonces físicamente y por ende futbolísticamente la formación esquelense fue mucho más. Nadie se sorprendió cuando a los 27 el pibe Gabriel Manosalva, ingresado minutos antes, liquidó la historia. Era el 4-2 que fue definitivo.
Tras la última conquista el local sacó un poco el pie del acelerador y Juventud Unida contó con alguna ocasión mal resuelta por sus delanteros. El cuadro costense dio batalla y jugó bien al fútbol mientras le dio el físico, pero cuando las piernas ya no respondían la superioridad de San Martín fue muy clara. Por eso el Rojo es escolta a tres de Belgrano y peleará hasta el final, por eso los de Miguel Gómez estarán a la expectativa de equivocaciones de ambos cuadros esquelenses para volver a arrimarse.
San Martín no se rinde y da pelea
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